La comunicación política es una subdisciplina que surge del entrecruce de la comunicación y la ciencia política para estudiar la forma en que la información se difunde e influye en la política y en el intercambio de mensajes entre los políticos, medios de comunicación y el público general1.
Uno de los aspectos más importantes de la comunicación política es el manejo de crisis, que consiste en la capacidad de reaccionar adecuadamente ante situaciones imprevistas o conflictivas que pueden afectar a la imagen o reputación de un actor político2.
Un ejemplo reciente de mala comunicación política en el manejo de crisis es el que se ha dado en Perú durante la pandemia del COVID-19. El gobierno peruano ha sido criticado por su falta de transparencia, coordinación y liderazgo a la hora de enfrentar la emergencia sanitaria, lo que ha generado desconfianza y malestar entre la ciudadanía2.
Algunos errores de comunicación política que se han cometido son:
- No tener un portavoz único y claro que informe sobre las medidas adoptadas y los datos actualizados sobre la situación epidemiológica.
- No explicar con suficiente detalle y anticipación los criterios y razones para establecer las restricciones o flexibilizaciones según las regiones o sectores económicos.
- No reconocer ni asumir responsabilidades por los problemas o fallas en el sistema de salud, el proceso de vacunación o el apoyo económico a las familias afectadas.
- No dialogar ni consensuar con los otros poderes del Estado, los gobiernos regionales o locales, los partidos políticos o las organizaciones sociales las acciones a seguir para enfrentar la crisis.
- No transmitir un mensaje coherente, consistente y empático con las necesidades y demandas de la población.
Estos errores han provocado una grave crisis política que ha derivado en cambios constantes en el gabinete ministerial, cuestionamientos al presidente y al Congreso, protestas sociales y una baja popularidad del gobierno2.
La lección que se puede extraer de este caso es que una buena comunicación política es fundamental para generar confianza, legitimidad y gobernabilidad en tiempos difíciles. Para ello, se requiere tener una estrategia clara, un equipo profesional, un mensaje veraz y un canal efectivo3.
